Page 8 - Balance Hídrico Superficial de Bolivia
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            En la planicie, de igual forma, una convexidad de altitud superior a 250 m   precipitaciones son allí más elevadas en la parte situada al noroeste de Santa Cruz
      enlaza el extremo oriental de la cadena andina con el Escudo Brasileño.            que en la que se extiende al sur. si bien se observan concentraciones de fuerte
            El Escudo Brasileño se presenta bajo forma de una meseta con relieve de      precipitación todavía en los primeros relieves de la cadena.
      "mesas" que alcanza en Brasil alturas ligeramente superiores a 1000 m en el extremo     La vasta meseta del Altiplano recibe precipitaciones superiores a 500 mm
      norte de la cuenca del Itenez.                                                     año! al norte de la latitud de La Paz. En la cuenca del lago Titicaca las isoyetas
                                                                                         son globalmente concéntricas al lago, en el centro del     cual se observan
            Los terrenos andinos son de todas las edades geológicas, del Paleozoico al   precipitaciones superiores a 1000 mm año-l. Las lluvias tienden a disminuir a medida
      Cuaternario. Han sido afectados por la orogénesis del Plioceno, con pliegues locales  que aumenta la distancia del lago, hasta mínimas de 600 a 500 mm año-l. Se
      del Cretáceo Superior y Eoceno. Las cumbres más altas de la cordillera oriental    incrementan nuevamente hacia las cumbres de la Cordillera Oriental donde los
      están formadas por rocas intrusivas (granito y granodiorita). La cordillera oriental  valores extremos pueden superar los 800 mm añoJ, así como hacia el oeste, donde
      es esencialmente volcánica. Sedimentos del Cenozoico y del Cuaternario ocupan      sobre la cuenca alta del río Coata, en Perú, las máximas pueden sobrepasarlos 1000
      losfondosdelos valles de la parte baja de los Andes. La llanura oriental está colmada  mm año-l. En dirección al sur, las lluvias disminuyen desde el centro del lago hasta
      por sedimentos detríticos plio-cuaternarios y cuaternarios. El Altiplano corresponde  el salar de Uyuni donde la pluviometría se toma inferior a 200 mm año-l.
      al relleno detrítico de una zona tectónica. La vertiente oriental de la cuenca está     Las cimas de la Cordillera Occidental corresponden a un ligero aumento
      constituida por series fluvio-glaciares cuaternarios, mientras que en la zona central  de las precipitaciones hasta valores de 300 a 500 mm año-l. Sobre la vertiente
      afloran series terciarias y cuaternarias. En la mitad sur del Altiplano se encuentran  pacífica chilena la precipitación disminuye rápidamente, con valores inferiores a
      los depósitos de sal y de salmueras (salares), de vastas superficies (Ballivian y  1 mm año- 1 al borde del mar.
      Risacher,1981).
                                                                                         PRECIPITACIONES Y DINÁMICA DE LAS MASAS DE AIRE
            En los Andes, a partir de las cumbres rocosas, hacia los 4500 m de altitud
      con la aparición de suelos poco profundos, se manifiesta una vegetación herbácea        La distribución de las lluvias se explica por la dinámica de las principales
      dispersa (Brockmann, 1978). Estas especies son reemplazadas a los 3500 m por una   masas de aire activas en esta parte de América del Sur, y por el rol orográfico
      vegetación de tipo tropical, ya sea húmeda en suelos relativamente profundos, o    de los Andes, tanto a escala continental como a escala del valle (Rache et al., 1990).
      semiárida en suelos pobres, según la pluviosidad de las zonas, a veces con un
      pasaje corto de tipo templado o mediterráneo de origen antrópico. En la cuenca     Las masas de aire atlántico y amazónico
      amazónica, no obstante, la vegetación tropical húmeda siempre acaba por ocupar
      el flanco oriental de los Andes a partir de altitudes comprendidas entre 3500 m    La cuenca amazónica es generalmente un centro de bajas presiones con respecto
      y menos de 1000 m. En la planicie, sobre suelo espeso, el bosque da lugar hacia    a los anticiclones del Pacífico Sur y del Atlántico. La dinámica del conjunto está
      el este a la sabana herbácea inundable de bosque de galería, y luego reaparece     regulada esencialmente por la inclinación aparente del sol que determina la
      en el Escudo Brasileño poco después de la confluencia del Mamaré con el Itenez     oscilación estacional de la Zona Intertropical de Convergencia (ZITC) y de los
      para iniciar la gran selva amazónica. En el Chaco, la vegetación es de tipo herbácea  citados anticiclones (Rache, 1988).
      y arbórea espinosa.                                                                     Durante el invierno austral, la ZITC alcanza las Antillas y los anticiclones
                                                                                         tropicales meridionales retoman a sus latitudes más septentrionales, vecinas a la
                                                                                         cuenca amazónica de Bolivia. Es la estación seca, caracterizada por una mejor
                 LAS PRECIPITACIONES                                                     estabilidad del aire y una menor disponibilidad de vapor de agua.
                                                                                              Durante el verano austral, la ZITC oscila sobre la amazonia boliviana donde
                                                                                         su notable inflexión hacia el sur extiende ampliamente las bajas presiones tropicales.
       DISTRIBUCIÓN ESTACIONAL DE LAS PRECIPITACIONES
                                                                                         Tiene lugar entonces la estación lluviosa, que determina finalmente la distribución
      La similitud de los hietogramas mensuales interanuales de toda Bolivia, tal como   espacial de las precipitaciones, teniendo en cuenta la importancia relativa de la
       figuran en la carta pluviométrica, muestra la pertenencia de toda esta región     lámina precipitada durante este período.
       sudamericana a un mismo régimen pluviométrico.
                                                                                              Los vientos alisios del sector noreste se desvían a lo largo de los Andes según
            La estación lluviosa se centra en el verano con un máximo en enero y en      la inflexión sud-sudeste de la cadena. Aportan sobre Bolivia lo esencial del vapor
       segundo lugar en febrero. Se inicia generalmente en diciembre para concluir en    precipitable originario del Atlántico al norte del Ecuador, pero que se ha reciclado
       marzo. La estación seca es en invierno, con un mínimo de mayo a julio. Dos        ampliamente a partir de la evapotranspiración de la selva y de las vastas zonas
       períodos de transición separan estas dos épocas, uno en abril y otro de septiembre  inundadas. Estas últimas, solamente en la llanura boliviana. cubren unos 100.000
       a noviembre.                                                                      km 2  al finalizar la estación lluviosa. Los alisios del sector sudeste contribuyen al
            En el conjunto del país. un total de 60 a 78% de las precipitaciones ocurren  aporte de humedad directamente desde el este y el sudeste. Los alisios del hemisferio
       durante los cuatro meses más lluviosos, y de O a 15% durante los cuatro meses     norte, que barren todo el "Mar Amazónico" durante la estación lluviosa, tienen
       más secos. El período seco es tanto más severo cuanto es reducido el total anual.  una incidencia pluviogénica mucho mayor que los alisios del hemisferio sur que
       En la cuenca del lago Titicaca, según la subcuenca, 65 a 78% de la precipitación  ya han atravesado los relieves del borde atlántico. Por esta razón el sur de Bolivia
       anual se acumula durante los cuatro meses de la estación seca. Los dos períodos   es menos lluvioso que el norte.
       intermedios corresponden a una precipitación de 18 a 29%. En el conjunto de la         En el norte del Altiplano, el aire húmedo rebasa periódicamente las cumbres
       cuenca, estos valores respectivos son de 70% y 25%, ya que el período seco no     de la Cordillera Oriental situadas entre 4500 m y más de 6400 m, principalmente
       acumula más que un 5%.                                                            en la estación lluviosa. Los alisios, sobre todo el del sector noreste, aportan de
                                                                                         esta forma el agua al sistema hidrológico de los lagos Titicaca y Poopo, así como
            Tomando períodos plurianuales, la influencia del fenómeno de El Niño se      a los salares, si bien en inferior cantidad en la vertiente del Altiplano que en el
       traduce en una tendencia seca durante los episodios más acentuados (Molion, 1991,  flanco oriental amazónico.
       Rache et al., 1990).                                                                   La convección diurna de esta humedad, tanto en la planicie como en los Andes,
                                                                                         es responsable de gran parte de las precipitaciones. Corresponde por lo tanto al
       DISTRIBUCIÓN ESPACIAL DE LAS PRECIPITACIONES                                      reciclaje de vapor de agua transportado por los alisios (Villa Nova et al., 1976;
                                                                                         Franzel, 1979; Jordan y Heuveldop, 1981; Salati et al., 1984).
       A partir de las regiones amazónicas del pie de monte de los Andes marcadamente
       bañados (6000 a 7000 mm año"), el cruce de la cordillera por 400 km conduce       Las masas de aire polar
       al desierto chileno y peruano, uno de los más extremos del mundo con menos
       de 1 mm año! a lo largo de la costa del océano Pacífico. En Bolivia, las          El sistema anteriormente descrito se ve perturbado con frecuencia por la intrusión,
       precipitaciones mínimas se sitúan al sudoeste del salar de Uyuni, con valores del  en la planicie adyacente a los Andes, de aire más frío y seco proveniente del sur
       orden de 100 mm año! (Roche et al., 1990, Aquize, 1980). La carta de isoyetas     (Surazo), con la formación de un frente frío por contacto con las masas de aire
       muestra la distribución espacial de las precipitaciones medias interanuales del   húmedo y generalmente más cálidas que ocupan la región. La progresión de las
       conjunto de la región hidrológica tomada en cuenta.                               masas de aire frío ha sido explicada por Leroux (1987) según el mecanismo de
            En la llanura adyacente a los Andes, los valores crecen desde 600 mm año!    anticiclones móviles poco espesos que se separan del anticiclón antártico y avanzan
       en el sur hasta 2000 mm año! al norte, según isoyetas en forma de canal en eje    hasta las bajas latitudes apartando las restantes masas de aire oriental y amazónico.
       sobre los ríos Pilcomayo, Parapeti, Negro, Itenez y Mamaré. La lluvia aumenta así  La distribución pluvial en la llanura, según una inflexión de isoyetas en canal y
       en dirección al Escudo Brasileño y los Andes. Un poco antes o sobre el primer relieve  un fuerte incremento de los valores de sur (600 mm añoI) a norte (2000 mm añoI),
       de los Andes se observan las máximas del país, con más de 6000 mm año-l.          denota la interferencia de las dos masas de aire. El aire seco proveniente del sur
            En la cordillera oriental se encuentran también zonas aisladas con lluvias   se ve canalizado por la depresión topográfica (500 a ISOm) situada entre los Andes
       inferiores a 500 mm año-  l,  como en la región de Cochabamba. Es el caso general  y el Escudo Brasileño (1500 m). El descenso de las temperaturas que acompaña
       en el sur de la cadena donde se identifican mínimos de 300 mm año-l. Las          los frentes fríos puede alcanzar IOoC de un día para otro, y las caídas de las lluvias
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