Page 86 - MONITOREO DE CONTAMINACIÓN DE LA CUENCA DEL RÍO PILCOMAYO
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ANEXO 4
LA CLARIFICACION DEL AGUA
INTRODUCCIÓN
Las aguas naturales del Pilcomayo después de pasar a través de los humedales artificiales
y a mayor razón si se toman crudas del río, contienen sustancias tanto disueltas como en
suspensión, ambas pueden ser orgánicas e inorgánicas. Las materias en suspensión pueden
tener un tamaño y densidad tal que pueden eliminarse del agua por simple sedimentación,
pero algunas partículas son de un tamaño muy pequeño y tienen una carga eléctrica
superficial que las hace repelerse continuamente, impidiendo su aglomeración y formación
de una partícula más pesada y poder así sedimentar. Estas partículas, con una dimensión
que suele estar comprendida entre 1 µm y 0,2 µm, son verdaderas partículas coloidales.
La coagulación en el proceso de tratamiento del agua tiene por objeto agrupar estas
partículas coloidales dispersas en el agua en otras más voluminosas y pesadas que puedan
ser separadas más fácilmente del agua.
Mediante el proceso de coagulación se neutraliza la carga eléctrica del coloide anulando
las fuerzas electrostáticas repulsivas, esta neutralización suele realizarse aplicando al agua
determinadas sales de aluminio o hierro (coagulantes); generalmente se aplica sulfato de
aluminio, de forma que los cationes trivalentes de aluminio o hierro neutralizan las cargas
eléctricas negativas que suelen rodear a las partículas coloidales dispersas en el agua.
La coagulación se consigue mediante una difusión rápida de las sustancias coagulantes en
el agua objeto del tratamiento, empleando en lo posible, medios de agitación rápida. Tras
la neutralización de las partículas coloidales, es decir una vez conseguida la
desestabilización coloidal, las partículas formadas están en disposición de aglomerarse,
esta aglomeración de las partículas descargadas ayudadas ahora por una agitación lenta, es
el objetivo de la floculación.
MEZCLADOR RAPIDO
La coagulación y la floculación tienen lugar en sucesivas etapas, de forma que una vez
desestabilizadas las partículas, la colisión entre ellas permita el crecimiento de los
microflóculos, apenas visibles a simple vista, hasta formar flóculos mayores. Al observar
el agua que rodea a los microflóculos, ésta debería estar clara, si esto no ocurre, lo más
probable, es que todas las cargas de las partículas no han sido neutralizadas y por tanto la
coagulación no se ha completado, en este caso será necesario añadir más coagulante.
En la eficacia de la coagulación influyen diversos factores entre los que destaca el pH y
otras características físico-químicas del agua, así como una adecuada energía de agitación
rápida para conseguir una apropiada dispersión del coagulante y proporcionar las
necesarias colisiones entre las partículas para conseguir una óptima coagulación. El
tiempo de esta mezcla rápida, en la correspondiente cámara de mezcla, suele ser del orden
de 1 a 3 minutos.
A continuación de la etapa de coagulación tiene lugar un segundo proceso llamado
floculación, éste tiene lugar tras someter a los microflóculos a una agitación lenta que
permite la unión de estos en agregados mayores o flóculos visibles ya a simple vista y con
la suficiente cohesión y densidad para someterlos a la siguiente etapa de sedimentación.
La floculación requiere un menor gradiente de agitación para impedir la rotura y