Page 258 - Control de la Contaminación - Lago San Jacinto (Afluentes)
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(Phormidium autumnale, Oscillatoria tenuis, Microcystis flos-aquae), diatomeas (Hantzschia
amphioxys, Fragilaria crotonensis, Synedra acus, Melosira granulata) y algas verdes
(Chlamydomonas ehrenbergi, Pediastrum boryanum, Scenedesmus quadricauda). Entre otros,
son también comunes en aguas de estas características: ciliados (Colpoda cucullus,
Paramecium caudatum, Oxytricha fallax), rotíferos (Brachionus urceolaris, Lecane lunaris),
anélidos (Stylaria lacustris), moluscos (Lymnaeae stagnalis, Radix ovata), larvas de insectos
(Sialis lutaria, Leuctra fusca, Notonecta glauca, Culex sp.) y peces (Barbus barbus).
En medios poco contaminados, con altas concentraciones de oxígeno y escasez de materia
orgánica, se detecta una merma tanto en el número de especies como en la producción de los
organismos fotosintéticos. Asociadas a estas condiciones están algunas diatomeas (Meridion
circulare, Nitzschia linearis), clorofíceas (Ulothrix zonata, Cladophora glomerata), ciliados
(Vorticella similis), larvas de blefarocéridos (Liponeura cinerascens), plecópteros (Perla
bipunctata) y efímeras (Ephemera vulgata), moluscos del género Sphaerium y peces (Salmo
trutta).
b) Presencia de algas en los puntos monitoreados
En las muestras de agua analizadas se identifico en la mayoría de los puntos presencia de:
Oscilatoria sp., Anabaena sp., y diatomeas.
Lo cual indica que el Lago San Jacinto presenta una leve contaminación, este factor hace que
se desarrollan algas autótrofas como las diatomeas, al existir una existencia moderada de
oxigeno.
La presencia de Anabaena sp. y Oscilatoria sp. se da por la existencia de nutrientes en el agua
(materia orgánica), en este caso principalmente de nitrógeno.
Las algas se han desarrollado en el embalse porque han encontrado condiciones favorables:
temperatura, sol y nutrientes. En la zona de estudio, a partir de la primavera,
la temperatura y el sol son suficientes, de forma que el crecimiento de las algas queda
limitado por la cantidad de nutrientes, especialmente nitrógeno y fósforo.
La presencia de algas en el embalse de San Jacinto, indican que este cuerpo de agua está en
proceso de eutrofización, es decir que sus aguas se están enriqueciendo en nutrientes.
Podría parecer a primera vista que es bueno que las aguas estén bien repletas de nutrientes,
porque así podrían vivir más fácilmente los seres vivos, ya que no les faltaría alimento. Pero
la situación no es tan sencilla, el problema está en que si hay exceso de nutrientes, crecen en
abundancia plantas y otros organismos. Más tarde, cuando mueren, se pudren, produciendo
malos olores y un aspecto nauseabundo, disminuyendo drásticamente su calidad. Este proceso
de putrefacción consume una gran cantidad del oxígeno disuelto y las aguas dejan de ser aptas
para la mayor parte de los seres vivos. El resultado final es un ecosistema casi destruido.
Los suelos erosionados, la descomposición de la materia orgánica silvestre y otros procesos
naturales producen, normalmente, cantidades limitadas de estos nutrientes, son, por tanto, los
aportes humanos los que favorecen la eutrofización, aspecto que ha sido corroborado por la
presencia de coliformes fecales, debido a la descarga de aguas sanitarias sin tratamiento, en el
embalse y en los lechos de sus afluentes
A continuación se grafica la secuencia y efecto de este proceso.
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