Page 71 - Plan de Uso de Suelo - Tarija
P. 71
es importante destacar la belleza paisajística de estos ambientes que forman parte del área de
amortiguamiento de la Reserva Nacional de Flora y Fauna Tariquía.
Actualmente se desarrolla exploración petrolera en las serranías de Alto Cañas, San Telmo y La
Moreta, actividad que determina una fuerte intervención e impacto sobre algunos factores del
ecosistema.
El uso actual es agrosilvopastoril donde domina la ganadería extensiva con vacunos y caprinos,
seguida del aprovechamiento forestal selectivo y la agricultura a secano. Sin embargo, las
características topográficas, la vegetación boscosa y la presencia de plantas tóxicas constituyen
limitantes muy graves para la actividad ganadera. En el sector próximo al Valle Central de Tarija
la carga animal se incrementa en los meses de abril a octubre, cuando como consecuencia de la
falta de forraje se traslada el ganado vacuno del Valle Central a las zonas húmedas del
Subandino, proceso conocido como trashumancia.
También se extrae madera en pequeña escala en forma selectiva, rudimentaria y generalmente
clandestina de las especies de mayor valor económico.
En muchos lugares la vegetación presenta un alto grado de alteración, especialmente del estrato
herbáceo, con una proliferación de especies indeseables desde el punto de vista de la ganadería
La población de animales silvestres es abundante, la misma que al presente se halla sometida a
una fuerte presión por parte de cazadores de las poblaciones vecinas.
La accesibilidad es media para los sitios cercanos a la carretera asfaltada que vincula el Chaco
con la ciudad de Santa Cruz y muy restringida para las tierras ubicadas al norte y sur de la
provincia O’Connor, por la inexistencia de vías de transporte como por la distancia a los centros
de consumo. La densidad poblacional generalmente es baja aunque existen algunas áreas con
densidad media; una gran parte del área se puede calificar como área de colonización por los
contingentes humanos relativamente recientes asentados en dicha región, situación que conlleva
la presencia de conflictos de tenencia de la tierra. Además, es importante destacar la presencia de
comunidades del pueblo Guaraní en el sector norte de la provincia O’Connor, quienes aún no
tienen definida la tenencia de las tierras que demandan, las que al presente se superponen con
propiedades ganaderas, situación que mantiene latente un conflicto de derechos, que tiende a
agudizarse.
La disponibilidad por productor de tierras agrícolas es 4,6 ha. y de tierras en general es 27 ha. Los
niveles de titulación son bajos, ya que el 54% de los entrevistados cuenta con títulos de
propiedad. Existe una significativa migración temporal (el 47% de las familias entrevistadas tiene
al menos un miembro trabajando temporalmente fuera de la unidad familiar de producción). En
general, los niveles de manejo y de aplicación de capital en las actividades productivas varían de
muy bajos a bajos, aunque en algunos casos el empleo de capital en actividades agrícolas y
pecuarias llega al nivel medio. La infraestructura comunal disponible en materia de servicios
básicos, producción, riego, comunicación y recreación es baja, y la provisión de servicios para las
actividades productivas y de conservación de la tierra por parte de organizaciones locales es
prácticamente inexistente.
Plan de Uso del Suelo del Departamento de Tarija. 71